La adolescencia comienza aproximadamente a los 12 años, pero es en torno a los 14-16 cuando los jóvenes necesitan un cambio real en su habitación. Ya no basta con la cortina de patitos, el póster de dibujos animados o la cama de 90 cm que fue perfecta en su infancia. Llegados a esta etapa, buscan un espacio que los represente, que les dé comodidad y que además esté preparado para los próximos años, incluso cuando se independicen.
¿Por qué renovar?
- Comodidad y espacio para crecer
A partir de los 14-16 años, los adolescentes estudian más, pasan más tiempo en su cuarto, reciben amigos o necesitan un lugar para sus hobbies. Una cama de 90 ya no siempre resulta práctica ni cómoda. - Identidad e independencia
Es un momento clave para forjar su propio estilo. Colores, decoración y mobiliario deben darles libertad para expresarse y sentirse dueños de su espacio. - Preparación para el futuro
Renovar la habitación en esta etapa es también anticiparse: la conviertes en un espacio funcional que seguirá sirviendo cuando ellos se independicen o vuelvan a casa en visitas. - Bienestar emocional
Un entorno cuidado y acorde a su edad tiene un gran impacto en cómo se sienten: seguros, respetados e inspirados.
¿Qué cambios conviene hacer?
- Cama más grande: pasar a una de 135 o 150, según el espacio, para ganar confort.
- Mobiliario funcional: escritorio amplio, buena iluminación, estanterías y espacio de almacenamiento.
- Colores neutros con acentos personales: un estilo que se mantenga vigente en el tiempo, pero que admita detalles propios.
- Textiles y decoración renovados: cortinas, ropa de cama e iluminación que acompañen este nuevo momento.
- Rincón multiuso: un área para estudiar, otra para relajarse, leer, jugar o escuchar música.
Consejos para hacerlo sin estrés
- Involucra a tu hijo/a en el proceso para que el cuarto refleje su personalidad.
- Planifica antes de cambiar: mide, define distribución y piensa en lo que se mantiene y lo que se renueva.
- Hazlo poco a poco: no es necesario cambiar todo de golpe; puedes empezar por cama y textiles y después seguir con el resto.
Transformar la habitación infantil en un espacio adolescente es mucho más que un cambio estético: es acompañar su crecimiento, reconocer la nueva etapa que vive y darle un lugar en el que se sienta cómodo y valorado. Una inversión que se disfruta en el presente y también en el futuro.
🌐www. midecoradoravip.es
📧mdv@midecoradoravip.es
📲678271382